Cada vez más personas deciden que su cuerpo sea incinerado tras su muerte. En 2019, un 41 % de los fallecidos en España eligieron esta opción, y se estima que en 2025 el porcentaje de incinerados será de un 60 %. Por ello, cada vez se escucha más el término columbario, ¿pero sabemos realmente lo que es y en qué se diferencia de un nicho o una tumba?. Desde el blog de Mármoles Artísticos Manolo Simón te queremos descubrir el concepto de columbario y los materiales en que puede realizarse.
¿Qué es un columbario?
Un columbario es un tipo de nicho pensado para almacenar en su interior urnas funerarias. Los columbarios se construyen en vertical y están divididos en varios compartimentos más pequeños con espacio para una o varias urnas cada uno.
Este tipo de enterramientos también reciben el nombre de nichos para cenizas, pues en ellos solo se pueden añadir urnas cinerarias. De hecho, esta es una de las principales diferencias entre un nicho y un columbario: los nichos sí permiten enterrar cuerpos, féretros o restos, mientras que los columbarios solo cuentan con espacio para las urnas.
Y ¿qué diferencia un columbario de una tumba? Las tumbas suelen excavarse directamente en la tierra y permiten enterrar un féretro o un cuerpo. Los columbarios no se hacen en huecos en la tierra, sino que se realizan construcciones en mármol, cemento o granito, siempre en vertical, creando varias columnas y filas para un número variable de urnas.
Una de las grandes ventajas de los columbarios es que se pueden colocar en casi cualquier sitio, pues son mucho más higiénicos que el resto de tumbas y no es necesario aplicar unas medidas sanitarias específicas con ellos. En la gran mayoría de cementerios existen columbarios públicos, en salas cerradas o al aire libre, y cada vez es más frecuente preparar espacios para urnas en pequeños panteones familiares.
Materiales en que se fabrican los columbarios
Los nichos para cenizas suelen tener un diseño sencillo y minimalista, y lo más habitual es que en su construcción se usen materiales como el mármol o el granito. No obstante, hay algunas personas o ciudades que buscan acabados más majestuosos e incorporan a su diseño detalles en bronce, metales preciosos, etcétera.
Además, es interesante saber que, si se hace un pequeño columbario en un panteón familiar, este puede ir abierto y que las urnas queden visibles, o cerrado, para que delante de cada hueco haya una inscripción en mármol. No obstante, en caso de columbarios públicos, lo más recomendable es proteger la urna con una placa de mármol donde se escribe el nombre del fallecido y la fecha de la muerte, como si fuese una lápida.
¿Cuál es el origen de los columbarios?
La tradición española siempre ha favorecido el enterramiento en nichos o tumbas, por lo que podríamos pensar que el origen de los columbarios es algo moderno, pero lo cierto es que el uso de los columbarios se remonta a hace siglos. De hecho, la civilización romana fue una de las que más utilizó este tipo de enterramientos y todavía se conservan columbarios históricos.
Como curiosidad, la palabra columbario viene del término latino “palomar” (columba es paloma en latín), porque los primeros columbarios que se hicieron guardaban un gran parecido con los palomares, con una forma cuadrangular y un interior semicircular.
En Mármoles Manolo Simón llevamos años realizando columbarios y todo tipo de arte funerario. Trabajamos con mármol, granito y otros materiales para crear nichos de cenizas y lápidas que capturen la esencia del difunto al que rinden homenaje. Nos sentimos muy orgullosos de acompañar a nuestros clientes en este delicado momento. Como empresa del sector, somos plenamente conscientes del auge que están teniendo las incineraciones y, por ello, no dudamos en unir tradición y modernidad para poder adaptarnos a las preferencias de nuestros clientes en todo momento.
