El mármol en chimeneas como elemento decorativo y resistente

Entre sus múltiples y variados usos, los mármoles son los aliados perfectos para revestir tus chimeneas con elegancia y sofisticación. Si quieres saber por qué el mármol es un material tan ventajoso y cuáles son las opciones que te ofrece a nivel decorativo y de interior, has llegado al post de Mármoles Artísticos Manolo Simón correcto. Sigue leyendo…

Ventajas del mármol en las chimeneas

Además de por su indudable cualidad estética, el revestimiento de mármol en chimeneas es ideal por motivos puramente pragmáticos. Tiene cuatro ventajas a destacar.

Resistente al calor

Desde el punto de vista funcional, lo primero que has de considerar es el tipo de material que emplearás en tu chimenea. El mármol es una piedra porosa que aguanta sin problemas la incidencia del calor. De hecho, es necesario someter esta roca metamórfica a muy altas temperaturas para darle forma.

Optimiza el consumo

Precisamente por su cualidad porosa, el mármol conserva el calor durante mucho más tiempo. Incluso tras apagar el fuego, comprobarás que el mármol es capaz de mantener el calor durante horas. En otras palabras, con el mármol ahorrarás energéticamente; la habitación permanecerá a una temperatura óptima por más tiempo y sin que debas invertir un mayor presupuesto.

Fácil mantenimiento

Dado que las chimeneas suelen ensuciarse con asiduidad, es clave contar con un material que favorezca su rápida limpieza. El mármol pulido es excelente en este caso: con un jabón neutro y agua caliente, eliminarás sin esfuerzo las manchas.

Calidad estética

La chimenea suele llamar por sí misma la atención en cualquier salón o estancia en la que esté presente. ¿Qué mejor que realzar su protagonismo innato con un buen mármol? La apariencia lujosa de este material hace de él una opción ideal con independencia de si la estancia sigue un estilo moderno, minimalista, clásico…

Opciones decorativas y consejos prácticos

La variedad de colores y veteados en los que puedes encontrar el mármol multiplica las posibilidades estéticas. Según el estilo que busques, debes considerar la idoneidad del tono.

Por ejemplo, en los ambientes clásicos, combina a la perfección un mármol blanco con un ligero veteado. Se pueden molduras trabajar en este mármol para favorecer su integración en el espacio. Eso sí, si optas por esta idea, procura incluir un mobiliario y decoración cálidos que contrasten con la frialdad del material.

Por su parte, el mármol negro para chimeneas funciona muy bien en las estancias de estilo vanguardista o industrial donde se priorice la simplicidad, el detalle y los perfiles rectos. Si tu estilo responde al lema «Menos es más», esta tonalidad cubrirá completamente tus expectativas.

Otros colores más especiales como, el mármol verde o el rosa, tienen una doble lectura. Por un lado, pueden emplearse para darle un toque original a un espacio neutro y sin estridencias. Por otro, casan con habitaciones de estilo ecléctico en las que cada detalle brilla por sí solo sin opacar a los demás.

Un último factor que debes considerar es el acabado de la piedra. Por ejemplo, si lo tuyo son los ambientes rústicos, un mármol de textura rugosa le dará una impronta rústica al espacio, con independencia del color que elijas.

Cuenta con marmolistas profesionales para una chimenea perfecta en tu hogar

Te decantes por el mármol que te decantes, lo importante es atender a unas cuestiones técnicas que te permitirán mantenerlo en perfectas condiciones durante años. En este sentido, es fundamental que, antes de instalarlo, cuentes con profesionales marmolistas como los que forman parte del equipo de Mármoles Manolo Simón, de manera que apliquen en tu chimenea un cemento de cola blanca flexible para pegar las losas del revestimiento. Sin el cemento, las altas temperaturas podrían romper o fracturar el mármol al debilitar su estructura porosa.

Otra recomendación: has de aplicar un producto tapaporos en las placas marmóreas. Así no solo evitarás que se manchen, sino también que se les incruste la suciedad. Hazlo antes de encender la chimenea por primera vez cada temporada. Debería ser parte de su mantenimiento anual.

Los mármoles, en todos sus colores y acabados, son una alternativa práctica y muy visual que elevará el nivel decorativo de tu chimenea.