Debido a sus propiedades, la piedra se ha utilizado como material de construcción desde la antigüedad y su uso se ha mantenido hasta nuestros días. Se trata de un elemento estético, elegante y atemporal que se adapta perfectamente a cualquier construcción.
Es muy habitual su uso en fachadas y elementos exteriores, pero cada vez es más común en decoración de interiores. Por ello, optar por piedra natural para los suelos y las paredes es un recurso muy a tener en cuenta a la hora de reformar una vivienda.
Desde Mármoles Artísticos Manolo Simón te contamos algunas de las propiedades de la piedra natural y sus ventajas en su uso en suelos y paredes.
La versatilidad de la piedra natural
Si hay una palabra con la que podemos definir el uso de la piedra en la construcción es sin duda versatilidad. La piedra natural ofrece multitud de posibilidades gracias a sus muchos tamaños, colores, formas o texturas. De este modo, puede ser un elemento más en la decoración de tu hogar. Entre las opciones disponibles destacan el mármol, la pizarra, el granito, la cuarcita, la piedra caliza, la arenisca o la piedra sintetizada a partir del granito, el vidrio, el sílice y los óxidos naturales.
Todas ellas pueden instalarse en paredes o suelos para aprovechar al máximo sus ventajas. Una de las más destacadas es que se trata de un material muy limpio e higiénico. Prácticamente no exige mantenimiento, ya que no tendrás que pintarlas o tratarlas.
Otra gran ventaja es que es un material muy duradero. A diferencia de lo que sucede con otros materiales, la piedra es muy resistente a golpes y rayaduras, lo que la hace un material perfecto para el día a día, ya que el desgaste es prácticamente imperceptible.
Las propiedades térmicas de la piedra
Otro factor muy a tener en cuenta está relacionado con los aspectos ecológicos. El más evidente de ellos son sus propiedades térmicas, gracias a las que notarás un ahorro energético, en especial en los meses de invierno. Por sus características, la piedra absorbe la temperatura ayuda a mantener caliente la estancia, de modo que el gasto en calefacción será menor. Por este motivo es uno de los materiales más utilizados junto a las chimeneas, ya que además resiste a los cambios de temperatura sin deteriorarse.
Otro de sus beneficios es que su instalación impide el paso de las vibraciones del exterior. Así, se reducen los niveles de contaminación acústica dentro de la vivienda, convirtiéndola en un lugar mucho más tranquilo en comparación con el uso de otros materiales. Sin duda se trata de una gran ventaja para ganar en bienestar y calidad de vida.
Tampoco podemos pasar por alto que si decides acometer una reforma y utilizas la piedra para suelos y paredes, aumenta el valor de la vivienda. Si optas por alquilarla, será un punto más a tu favor.
Por otra parte, la piedra natural se caracteriza por ser un material 100 % ignífugo, por lo que resiste el fuego mucho mejor que otros materiales y puede llegar a actuar como elemento protector en caso de incendio.
Diseño y modernidad de la piedra natural
En cuanto a las posibilidades de decoración, la gran variedad estética hace posible la elección entre un sinfín de colores y texturas, de modo que permite su uso sea cual sea nuestro estilo y en cualquier estancia que imaginemos.
De hecho, como habrás podido comprobar, se trata de un material que no solo se utiliza en viviendas, sino que también es muy usual encontrarlo como elemento decorativo en oficinas, restaurantes, comercios o despachos.
En definitiva, se trata de un material versátil que a la vez aporta un toque de exclusividad a los espacios. El hecho de que cada piedra sea única y sea imposible encontrar dos iguales hace que una pared de piedra natural sea inimitable. Por ello, si quieres destacar tus paredes como algo único, la piedra natural es la solución que estás buscando.
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